A la entrada de Guadalix de la Sierra, al norte de Madrid y rodeado de zonas ajardinadas, nos encontramos el Llantar de la Sierra, junto con una excelente terraza para disfrutar, no sólo de la gran carne de la zona, sino también de magníficos pescados, platos de marisco muy bien seleccionados y unos estupendos pucheros, que no nos dejan de sorprender.
No es la primera vez que acudimos al restaurante y siempre que hemos ido nos han tratado genial. Comenzó su andadura a mediados de 2008, junto con la casa rural y al frente de la cocina se encuentra Pedro Martínez, con una selección de platos muy bien elaborados, si bien su mujer se encarga de los espectaculares pucheros que podemos degustar a diario.
El restaurante esta lleno de detalles. En la misma entrada nos encontramos en el suelo con una cristalera llena de botellas de vino y al levantar la vista nos topamos con una antigua “trilladora“, donde los agricultores se subían para hacer peso, mientras que una mula o una vaca tiraba de ella para separar el grano del trigo de las espigas.
Al llegar al salón observamos que estaba repleto y nos encaminamos a la segunda planta, donde también hay mesas junto a una chimenea. El lugar de por sí es acogedor, pero el recibimiento lo es aún más. Para los fines de semana es recomendable llamar con antelación para reservar.
Al tomar asiento nos atiendo Sergio, uno de los hijos del dueño. El restaurante tiene un menú diario (de lunes a viernes, siendo el más económico), un menú de fin de semana (con un coste de 35€ con la bebida incluida) y la carta. Además, siempre tiene platos fuera de carta, lo cual completa una oferta gastronómica muy interesante, desde la fantástica carne de la sierra de Madrid, pescado fresco hasta las mejores platos de cuchara. Y la atención de Sergio, excepcional.
Comenzamos tomando un pequeño aperitivo de la casa con unas patatas fritas caseras y un canapé de ensalada de cangrejo. Parece extraño pero las patatas ya nos sorprendieron. Luego pasamos al primer plato, donde compartimos Foie de Pato Mi Cuit, con cebolla caramelizada y espárragos verdes pasados por sarten con un poquito de aceite, todo sobre una base de salsa caramelizada. Realmente delicioso!!!
De segundos, nos decantamos por la carne. Comenzamos con una Presa Ibérica al Pedro Ximénez acompañado de patatas. La presa estaba muy suave y con el toque dulzón de la salsa hacía una combinación perfecta.
Y acabamos con carne roja de la Sierra de Madrid, muy poco hecha, acompañada de patatas y Pimientos de Padrón. La carne era mantequilla, se deshacía en la boca, una delicia y como podéis observar era bastante contundente. Los pimientos junto con las patatas eran el acompañamiento perfecto para este plato. Apto para buenos comedores o para compartir!
Los tres platos los acompañamos de un grandísimo vino del que hablamos la semana pasada, Dominio de Tares Cepas Viejas 2011. El maridaje fue excelente, porque es un vino fresco, directo, intenso, con una amplía gama de aromas a frutos rojas, especias y cuero, muy redondo y equilibrado. Fue el acompañante perfecto a esta gran comida.
En conclusión, estamos ante un restaurante acogedor, donde la calidad de los platos, y la elaboración de los mismos esta a un nivel superior, con una gran variedad, siendo el servicio y la atención es una gozada. Si vais al norte de la capital y podéis tomar algo de tiempo, no dudéis en realizar un pequeño desvío a Guadalix y comer en El Llantar de la Sierra.
Antonio
Tuve la oportunidad de comer en este restaurante hace un par de semanas y comparto la opinión de la página, se unieron una comida deliciosa (en este caso deguste el menú de fin de semana con tres entrantes, de segundo una carne espectacular y como colofón una variedad de tartas) y una atención magnifica.
Un lugar mu recomendable para disfrutar con tu familia o amigos.